La lista de los Dibujos Animados más viajeros de todos los tiempos

LA VUELTA AL MUNDO DE WILLY FOG

Si hay un dibujo animado digno de ocupar el primer puesto de este peculiar ranking entre las series de animación de todos los tiempos, este es sin duda la propuesta de Claudio Biern Boyd basada en la célebre novela de aventuras escrita por Julio Verne La Vuelta al Mundo en 80 días y readaptada bajo el nombre “La Vuelta al Mundo de Willy Fog”.

 En ella, nuestro amigo y apuesto caballero inglés presentado con aspecto de león, se apuesta la mitad de su fortuna con varios socios de su club privado y con el mismísimo director del Banco de Inglaterra a que es capaz de dar la vuelta al mundo en un plazo de 80 días. Acompañado de su mayordomo Rigodón y de su amigo, Tico, el entrañable ratón con acento andaluz se embarca en un viaje alrededor del mundo, que les deparará un sinfín de aventuras y contratiempos con el único objetivo de lograr llevar a cabo con éxito su ambiciosa misión.

Inolvidables y atemporales, siempre quedarán para el recuerdo sus aventuras por Japón, Nueva York, El Cairo o la India, país este, donde rescató a su inseparable y amada Romy.

La serie tuvo una secuela en 1994 que no gozó de la acogida de su antecesora pasando sin pena ni gloria por la parrilla televisiva.

EL TÍO MATT DE “LOS FRAGGLE ROCK”

No se puede entender como el protagonista principal de una serie ambientada en el mundo de los viajes, pero sí como un personaje con mucho carisma y cierto peso dentro de la mítica producción de los años 80´s Los Fraggle Rock.

Matt era el tío aventurero de Gobo que enviaba postales a su sobrino desde todas las partes de ese “mundo exterior” como los mismos Fraggle denominaban a todo lo que se hallase fuera de su cueva. En sus líneas narraba las peripecias a las que tenía que hacer frente mientras recorría todo tipo de lugares fascinantes, pero eso sí, lleno de “estúpidas criaturas”, que era la peculiar forma que tenía de referirse a los humanos.

LAS AVENTURAS DE EMILY Y ALEXANDER

Esta tira canadiense, estrenada en 1997 narraba las aventuras de dos primos ratones, uno de campo y otro de ciudad que se recorrían el mundo en el siglo XX y aprovechaban cada uno de sus viajes para hacer visitas a muchos de los miembros de la familia numerosa de ambos.

Durante este periplo tenían la oportunidad, además de explorar todo tipo de países y lugares maravillosos, de conocer de primera mano a reconocidos artistas, inventores, compositores e incluso personajes de la realeza contemporánea.

La serie tan divertida como didáctica trataba de aprovechar los viajes para inculcar valores positivos entre los más pequeños de la casa de aquella época.

LAS MIL Y UNA AMÉRICAS

Esta serie animada nació con el motivo del 5º Centenario del Descubrimiento de América y se estrenó en nuestro país a finales de los 80.

Sus protagonistas, un niño de 10 años llamado Chris y su inseparable perro Lon, tenían la capacidad de viajar en el tiempo gracias a un libro manuscrito que su abuelo había dejado en el desván de su casa tras volver de alguno de sus viajes. La imaginación de nuestro protagonista y su mascota provocaban que en cada capítulo se desplazaran a un lugar diferente siguiendo un estilo parecido a lo que hoy en día hacen los productores del “Ministerio del Tiempo” para dar cabida a tantas épocas y personajes saltándose de este modo el condicionante de una obligada cronología temporal.

Esta singular pareja nos enseñó a conocer a los niños de la época cómo vivían aquellas civilizaciones precolombinas como los mayas, los aztecas y los incas. Consiguió a despertar un interés especial (entre los cuales me incluyo) por toda la cultura de nuestros hermanos de Latinoamérica. Su contenido no estaba exento de fortalecer valores como el respeto por lo desconocido, la empatía o la tolerancia entre distintos.

LAS AVENTURAS DE TINTÍN

Fiel a las tiras de cómic creadas por el maestro Hergé, este salto a la pequeña pantalla se puede considerar un reflejo fiel de aquellas primeras viñetas del joven reportero.

Es indiscutible que personajes como Tintín desbordan carisma por los cuatro costados y son varias las generaciones que hemos crecido con sus aventuras. Sus viajes alrededor del mundo nos hicieron viajar desde el sofá desde los primeros años de nuestra infancia. El Congo, Rusia, China, América y hasta un sorprendente viaje a la luna fueron sólo algunos de los escenarios en los que transcurrieron sus peripecias.

Las tramas de sus episodios llenas de intriga, los giros inesperados en su guion y ese aire de thriller de detectives que ha rodeado siempre a sus tebeos consiguieron mantenernos pegados a estas tramas durante muchos años.

El elenco de personajes que acompañaba al intrépido periodista consiguió darle más empaque si pudo al universo creado por el ilustrador belga y pocos son los que no recuerdan a su fiel amigo el perro Milú, a su leal camarada el capitán Haddock, o a la inolvidable pareja de policías Hernández y Fernández.

La serie llegó a España de la mano de Canal + en el año 1992 y con un amplio catálogo constituido por 39 capítulos a lo largo de sus tres temporadas superó con nota el paso del papel a las imágenes en movimiento.

LOS THORNBERRYS

Esta producción estadounidense narraba los viajes de Nigel y Marianne Thornberry, alrededor del mundo con su familia haciendo documentales sobre la flora y fauna por cada uno de sus rincones.

Desde un primer momento se nos da a entender el factor vocacional que tenía la elección de Nigel de anteponer el hecho de irse a recorrer el planeta cuando este decide rechazar un importante puesto en la universidad de Oxford para perseguir su sueño.

Las hazañas de esta peculiar familia consiguen atraparte en una atmósfera envolvente desde sus primeras entregas , en las que utilizan a Nigel como narrador de las historias y a Marianne como operadora de cámara y editora del material que graban para presentarte las distintas tramas de cada episodio.

 La familia tenía tres hijos: Deborah, Eliza, y un crío un tanto salvaje adoptado por el matrimonio llamado Donnie, a estos hay que añadirle la presencia de su fiel mascota, un chimpancé llamado Darwin que reforzaba ese vínculo y respeto por la naturaleza que la serie trataba de transmitir.  

La saga de animación de “Los Thornberrys” fue emitida entre septiembre de 1998 hasta junio de 2004, dejándonos un total de 90 capítulos distribuidos en 5 temporadas diferentes. En mitad de su emisión la serie dio el salto a la gran pantalla con un largometraje que cosechó bastante éxito entre sus seguidores.

ÉRASE UNA VEZ LOS EXPLORADORES

Fue sin lugar a dudas e injustamente una de las propuestas que más desapercibida pasó de toda la franquicia de los “Érase una vez…”

 Con menos tirón y repercusión mediática que el resto de las creaciones de Albert Barillé, dicha entrega algo más tardía de esta familia animada de marcado carácter educativo nos acercaba de primera mano a la vida de esos personajes carismáticos cuyos viajes marcaron un antes y un después en la concepción de nuestra vida actual como la entendemos al día de hoy.

Algunos ejemplos de estas personalidades a las que se le dedicaron episodios enteros fueron Armstrong, Alejandro Magno o el mismísimo Capitán Cook. En cada capítulo se nos presentaba con un lenguaje coloquial y cercano los miedos de sus protagonistas, sus hojas de ruta, cálculos y suposiciones durante todo el proceso antes de llevar a cabo sus grandes logros y descubrimientos.

A pesar de haber sido creada en 1996 estamos ante una serie que no ha perdido ni un ápice de frescura ni credibilidad a la hora de analizarla con distancia casi un cuarto de siglo después. Estamos seguros de que un maratón de sus 26 capítulos algunas décadas más tarde no iba a defraudar nadie. Ahí lo dejamos.

Después de haber leído esta entrada del blog, estáis un poco más cerca de conocer otro de los factores que indirectamente pusieron en nosotros esa semillita para que en el futuro eligiésemos viajar como nuestra particular forma de vida y Viajando Diferente como la materialización de ese sueño 😉